Época:
Inicio: Año 37
Fin: Año 41 D.C.

Antecedente:
Gobierno de Claudio



Comentario

La concesión de los privilegios de municipio siguió ritmos distintos en las diversas provincias del Imperio. Mientras que en las provincias de Hispania hubo dos momentos significativos en el avance de la municipalización (el de César-Augusto y el de los Flavios), en las provincias de Africa fueron muchas más ciudades las que obtuvieron el estatuto de municipio durante los Antoninos y los Severos.
La obra de Claudio ha quedado en gran parte desdibujada; el emperador concedía privilegios de ciudadanía a particulares o a comunidades sin exigir que siempre fueran inscritos en una sola tribu. Pero a través de múltiples dedicaciones en honor del emperador testimoniadas en la epigrafía provincial así como por la información de los miliarios, se va desvelando paulatinamente que Claudio contribuyó al desarrollo de muchas ciudades provinciales; los efectos de su obra se comienzan a ver unos años más tarde, bajo los Flavios. Pero también hay testimonios más explícitos que ponen de manifiesto la creación de colonias y municipios: así, Baelo Claudia, Bolonia, cerca del estrecho de Gibraltar; colonia Claudia en la actual Colonia, etcétera.

Los soldados de las tropas auxiliares al ser licenciados y otros muchos provinciales griegos, galos, hispanos e incluso britanos recibieron la ciudadanía romana. Pero Claudio también se sirvió del procedimiento de conceder el derecho de ciudadanía latina a comunidades o particulares como paso previo a su plena integración posterior en la ciudadanía romana. Y este rasgo de su política demuestra que fue menos parco que Augusto en la concesión de privilegios de ciudadanía y, sobre todo, que comprendió que el Imperio no podía continuar con una marcada diferencia entre Italia y las provincias cuando éstas soportaban las cargas fiscales y militares en mayor grado que Italia. Como prueba de ello, baste comparar los datos de dos años del censo: el 28 a.C., como resultado del censo realizado por Augusto, la cifra de ciudadanos romanos adultos ascendía a 4.063.000; en el censo de Claudio del año 47 d.C. los ciudadanos romanos ascendían a 5.984.072 (Tác., Ann., XI, 25 ).

En ese marco político, se debe entender la decisión aún avanzada de integrar en el Senado romano a los nobles de las tres Galias, tal como se nos cuenta en la Tabula Lugdunensis, cuyo contenido está refrendado por las noticias de los autores antiguos.